Ancla

Es cierto que tengo debilidad por la literatura gringa. Y aunque Updike es una de las figuras representativas, está lejos de ser mi favorito. Siempre sus historias me hunden en un sopor mortífero, en un enfado del mundo y esa es quizá la gracia de Conejo. Nunca antes me había llamado la atención Updike hasta que leí "El hombre que amaba a los perros" de Leonardo Padura. En uno de los encuenrtos entre Ramón Mercader y el escritor, éste lee el libro de Corre, Conejo. Pensado absurdamente que esto podría tener algún simbolismo me dispuse a leer la primera parte de la tetralogía de Conejo y aunque no encontré nada nuevo me pareció un libro completamente norteamericano. sin haber leído el segundo y el tercer libro me encontré con la cuarta parte:  Conejo es rico; de que la que ahora escribo. Después de varias y estrepitosas experiencias conejo ve en su vida una estabilidad que nunca antes había logrado. Eso es lo que cree cuando el dinero fluye y su vida parece acomodada. Hast

Cada novela es una sorpresa, y en cada uno de sus libros he reiterado lo mucho que me gusta este escritor. Cuando leía la contraportada en la librería debo decir que no me atraía, no me atrapaba. Pero llegó a mis manos como un regalo del mi lector y persona preferida, al que le agradezco profundamente ese regalo (y todos los demás). Lo que creo es que la reseña es floja en comparación con lo que uno se encontrará en el nudo de la novela. Poca literatura sobre la literatura y este libro es precisamente sobre ello. Además, creo que cualquier reseña que pueda hacer sobre este libro se quedará en un intento debido a la complejidad del universo de "Operación Dulce" No hay otra época en que la Moral haya sido más problemática, el tener una opinión o no tenerla sobre el mundo puede resultar determinante en la vida de las personas. La responsabilidad de compartir ideas o de militar en una ideología puede determinar el curso de la vida de alguien.  La maestría con la que los c

En un mundo con tanta injusticia e impunidad es necesaria la Verdad; cosa que supongo no está en discusión para nadie. El arte y la literatura tienen una función fundamental en la forma en que se conciben las sociedades y se articulan los discursos individuales. Muchas veces funcionan como un bálsamo para el dolor que genera tan dura realidad. ¿Por qué digo esto? Porque cada vez que leo un libro del género de la novela negra reafirmo que  es literatura imprescindible para nuestros tiempos.  Si en algo radica la importancia de este género es no hacer una diferencia radical entre el bien y el mal, entre las fuerzas del orden y la delincuencia.¿Qué hacer en un mundo en el que la injusticia parece ser el mandato de las instituciones? ¿Qué hacer cuando los delincuentes son cómplices de aquellos que deberían impartir la justicia? La novela negra nos da esperanza, eso es. Esta vez, en Raymond Chandler, el detective Marlowe a pesar de su perfil bajo toma las riendas de una investigación que